ARTÍCULOS
ENTRENAMIENTO CARDIOVASCULAR
Realizado por:
Geraldine Martínez Delgado
Geraldine Martínez Delgado
Maria Fernanda Rojas
Angie Katherine Mendez
Gisselle Quiñones
Respecto a las imágenes podemos determinar cómo se lleva a cabo un entrenamiento cardiovascular ya que primero se deben tener en cuenta ciertos parámetros para prescribir este tipo de entrenamiento, primero se debe realizar la anamnesis en donde se determinan los antecedentes del usuario y las condiciones en las que vive, también se incluye los hábitos de vida que este maneja; después de esto se procede a realizar la prescripción del ejercicio donde se tiene en cuenta el método de entrenamiento cardiovascular que se va trabajar con el usuario, la intensidad, la frecuencia, el volumen, la duración y la progresión del ejercicio y por último se empieza a realizar el entrenamiento con el usuario, donde después de un buen tiempo de entrenamiento se podrán visualizar beneficios como lo es un aumento de suministro de oxígeno en la sangre, una mejora en el balance y la coordinación, así mismo la reducción de la hipertensión arterial, reducción de enfermedades como la diabetes y la depresión, una mejor circulación, etc.
Para el tema nos basamos en tres artículos los cuales son:
Entrenamiento interválico en pacientes con cardiopatía isquémica: metodología y análisis de resultados ergoespirométricos
Existen también programas de rehabilitación cardiovascular (PRCV) en los que se debe realizar la prescripción del ejercicio físico en función de objetivos planteados en la intervención con el usuario teniendo en cuenta aspectos como la edad, factores de riesgo, entre otros. Por ejemplo, según K. Villelabetia Jaureguizar, I. Díaz Buschmannb, E. Vaquerizo-García, M.J. Calero Rueda I. Mahillo Fernández en su artículo “Entrenamiento interválico en pacientes con cardiopatía isquémica: metodología y análisis de resultados ergoespirométricos”, existe evidencia científica que demuestra que el ejercicio físico consigue mejorar la capacidad funcional y la morbimortalidad de los pacientes con enfermedad cardiovascular. Los estudios realizados en el artículo mencionado demuestran que el entrenamiento de alta intensidad, aplicado de forma interválica, es más eficaz que la metodología tradicional de ejercicio moderado de tipo continuo, a la hora de mejorar la capacidad funcional cardiorrespiratoria y otras variables predictoras de riesgo cardiovascular como la cardiopatía isquémica. El entrenamiento interválico es una forma de ejercicio que se utiliza ocasionalmente en los programas de rehabilitación cardiovascular, permite cargas de esfuerzo superior al utilizado cuando se trabaja a un ritmo constante o entrenamiento continuo. Este tipo de entrenamiento se caracteriza por cortos períodos de alta intensidad de carga (intervalos pico), seguidos de intervalos de menor intensidad de carga (recuperación relativa). Por tanto, intervendrán procesos aeróbicos y anaeróbicos. Estos breves intervalos de recuperación relativa, fuerzan al paciente a ejercitarse a un nivel aeróbico con muy poca utilización del sistema glucolítico productor del lactato, permitiendo al sujeto mantener cómodamente estas cargas de trabajo de una forma prolongada en el tiempo y sin riesgo significativo de complicaciones cardiovasculares.
Bibliografía
K. Villelabetia-Jaureguizar; I. Díaz-Buschmannb; E. Vaquerizo-Garcíaa; M.J. Calero-Rueda b e I. Mahillo-Fernández. (2011). Entrenamiento interválico en pacientes con cardiopatía isquémica: metodología y análisis de resultados ergoespirométricos. Elsevier España.
Recuperado de:
Entrenamiento físico en pacientes con insuficiencia cardíaca
El entrenamiento de la capacidad cardiorrespiratoria, se puede realizar o trabajar en todo tipo de personas, niños, adolescentes, adultos, adulto mayor, mujeres gestantes o personas con diferentes patologías, realizando una excelente prescripción para mejorar este ámbito en la salud.
Según Barbara Fletcher, Peter Magyari, Karin Prussak, James Churrilla, en su artículo de entrenamiento físico en pacientes con insuficiencia cardiaca, comparte que hay suficiente evidencia científica donde el ejercicio mejora la función cardíaca, la calidad de vida y reducen los síntomas relacionados con Insuficiencia Cardiaca. Dice también, que en personas con función cardíaca normal, la práctica del ejercicio aeróbico da como resultado una mejor función cardiovascular y mejor consumo de oxígeno así como una menor frecuencia cardíaca en reposo y un mayor doble producto. El mejoramiento en el consumo de oxígeno es el resultado de un aumento del desempeño cardíaco y una mayor extracción de oxígeno en los músculos que están trabajando. El mejor desempeño cardíaco resulta de un aumento en el llenado ventricular y el volumen latido. Hay un aumento en el tamaño del lecho vascular coronario y una mayor capacidad de las arterias coronarias para dilatarse. El volumen sanguíneo aumenta y la sangre es menos viscosa lo que disminuye la resistencia al flujo y aumenta la entrega de oxígeno.
El entrenamiento de ejercicio aeróbico para pacientes con IC generalmente se prescribe a un 70% - 80% de la frecuencia cardíaca lograda en el test de ejercicios. Esto se considera dentro de un rango de alta a moderada intensidad, por lo que algunos pacientes no pueden ejercitar a este nivel y se beneficiarán con una intensidad más baja. Al igual que las personas con función ventricular izquierda normal, a los pacientes con IC se les recomienda ejercitar 30 minutos o más por 5 días o más a la semana. Esto puede ser continuo o dividido en intervalos más cortos.
La pérdida de capacidad física en la insuficiencia cardíaca está bien documentada y está relacionada con dificultades en el desempeño de actividades tanto en momentos de ocio como en la vida diaria, debido a una disminución de la tolerancia al ejercicio físico. Los pacientes con IC tienen dificultades para desempeñar actividades de la vida diaria en donde generalmente se emplean más las extremidades superiores que las inferiores. La dificultad para desarrollar actividades es un factor importante porque disminuye la calidad de vida de aquéllos con IC. En estos individuos, el entrenamiento físico puede aumentar la resistencia física y se ha demostrado en algunos estudios que mejora la calidad de vida relacionada con la salud. Las razones de incongruencia entre estudios puede estar relacionada a cómo los sujetos entrenan (protocolos de extremidades superiores vs. extremidades inferiores) e intensidades de los programas de ejercicios.
BIBLIOGRAFÍA
Fletcher,B. Magyari, P. Prussak, K. Churrilla, J. (2012). Entrenamiento físico en pacientes con insuficiencia cardiaca. revista medica clinica condes. recuperado de: https://www.clinicalascondes.cl/Dev_CLC/media/Imagenes/PDF%20revista%20m%C3%A9dica/2012/noviembre/entrenamiento-16.pdf
Programa de prevención y rehabilitación cardiaca: herramienta útil y necesaria en el tratamiento del evento cerebrovascular
El entrenamiento cardiovascular es una herramienta útil para el tratamiento de diferentes patologías cardiorrespiratorias, además trae grandes beneficios como lo es mejorar la capacidad aeróbica de un individuo durante el ejercicio, es por esto que Mónica Rincón en su artículo “Programa de prescripción y rehabilitación cardiaca: herramienta útil y necesaria en el tratamiento del ataque cerebrovascular” nos comparte como el entrenamiento funcional puede lograr mejorar la salud de las personas que hayan presentado este tipo de eventos; ya que las enfermedades cerebrovasculares es la causa de discapacidad neurológica en adultos y son la principal causa de muerte en Colombia.
sin embargo los accidentes cerebrovasculares van de la mano de las patologías cardiacas ya que los eventos coronarios son el principal factor de riesgo de los ACV, en un estudio realizado se identificó que las personas que habían padecido de un accidente cerebrovascular mayor a seis meses, demostraban limitación en cuanto a la movilidad y a la resistencia a la fatiga, imposibilitando su desempeño funcional e independencia para poder realizar actividades de la vida diaria, de allí nace el interés de la American Heart Association en crear programas de prevención y rehabilitación cardiaca para estas personas enfocándose principalmente en la educación para incentivar a realizar ejercicio e intervenir en los factores de riesgo cardiovascular, reducir el bajo acondicionamiento físico y de esta manera reducir la mortalidad y la recurrencia de sufrir nuevamente un ACV, ofreciendo programas de calidad y lograr evitar el sedentarismo que también es una de las causas de los eventos cardiacos, de igual forma se busca disminuir el costo económico, social, familiar y emocional para que la persona permanezca bajo las mejores condiciones posibles y se integre en las actividades de la vida diaria obteniendo una mejor calidad de vida.
Estos programas serán específicos y claves para trabajar con personas que tengan alguna discapacidad física, comunicativa, sensorial, cognoscitiva y con afectación cardiovascular, de tal forma que los beneficios que trae este tipo de entrenamiento cardiovascular y respiratorio intervienen en el aumento de la fatiga durante el desplazamiento, ayuda a evitar fracturas y caídas, mejora el gasto energético de la marcha hemiparética, mejora el equilibrio y la coordinación y mejora la oxigenación de la sangre,así mismo disminuye el nivel de prevalencia de discapacidad, mejora el estado de ánimo de las personas y aumenta la independencia para realizar las actividades de la vida diaria, así mismo se reducen la incidencia de factores de riesgo com la presión arterial, la diabetes mellitus, y una mejoría notable en la depresión.
BIBLIOGRAFÍA
Rincón, M. (2015). Programa de prevención y rehabilitación cardiaca: herramienta útil y necesaria en el tratamiento del evento cerebrovascular. Revista Colombiana de Cardiologia. Vol 22(1). Recuperado de : http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0120563315000376























